Son las dos fuerzas opuestas y complementarias en las que se manifiesta la energía. Su actividad es necesaria para la vida y su alternancia origina el movimiento.
El principio de polaridad rige todo lo que existe.
Las energías del cielo son de naturaleza yang: movilizan y activan la tierra.
Las energías de la tierra son de naturaleza yin: la ley de la gravedad atrae y sujeta a las energías del cielo para que puedan dinamizar.
Al mismo tiempo, como en un microcosmos, el organismo humano está igualmente unido a la interacción de la energía: LOS RITMOS NATURALES.
Yin y Yang son conceptos energéticos, interdependientes, uno en función del otro. En el extremo del yin comienza el yang y en el extremo del yang aparece el yin
Yin y yang no son absolutos, coexisten en diferentes grados o intensidades.